Dermatilomanía

La dermatilomanía también conocida como escoriaciones neuróticas, pellizcado cutáneo patológico, pellizcado cutáneo compulsivo o escoriación psicógena es un trastorno del control de impulsos caracterizado por el impulso repetitivo de rascar, pellizcar o excoriar la propia piel.La investigación ha sugerido que la necesidad compulsiva de rascar es similar al trastorno obsesivo-compulsivo, pero otros argumentan que es más parecido a un trastorno de adicción.

Dicha adicción a menudo es acompañada por la tensión, ansiedad, estrés o paranoia que las personas eliminan una vez realizada la práctica, sintiendo un gran alivio. 
Si bien este aspecto puede ser una perturbación social, es también un hábito de consumo de tiempo. 
Las regiones más afectadas por la dermatilomanía son:

1. Cara
2. Encías
3. Labios
4. Espalda
5. Cuero cabelludo                                                            
6. Estómago
7. Pecho
8. Extremidades: manos, cutículas, pies y brazos  

Se originan complicaciones de hinchazón, cicatrices y sangrado debido a los daños que se producen en la epidermis de la región afectada. Los daños pueden ser tan graves como para requerir un injerto de piel. Los casos graves pueden causar lesiones mortales.
Conscientes del daño que se están causando, muchas víctimas sienten y reconocen la necesidad de parar el comportamiento, pero están física y mentalmente incapaces de hacerlo sin ayuda. 
Enfermos de la dermatilomania, siendo más mujeres que hombres, encuentran que la enfermedad interfiere con la vida diaria, tratando de ocultarla por un sentimiento de vergüenza y una sensación de intensa culpa.

Los estudios han demostrado que la dermatilomanía presenta un pensamiento suicida en el 12% de las personas con esta condición, los intentos de suicidio en el 11,5% de las personas con esta enfermedad y las hospitalizaciones psiquiátricas en 15% de las personas con esta condición.